Galería de trabajos
Muestra de las diferentes obras autoría de Antonio Prats-Ventós
1974. Antonio Prats-Ventós, “Maternidad”. Mármol Ónix. Plaza de la Cultura. Santo Domingo, R. D.
1970. “Brotes”. Hecho de bumpers de automóviles. Plaza de la Cultura, Colección Museo de Arte Moderno. Sto. Dgo., R. D.
“Monumento a Juan Pablo Duarte”. 1977. Vaciado en bronce. Campus II de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña. El personaje de Juan Pablo Duarte seducía a Prats-Ventós. Le sirvió de tema para numerosas esculturas: cabezas, bustos, estatuas de cuerpo entero y relieves. Entre los monumentos se encuentra el levantado en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña, en el que la figura del prócer se yergue sobre un elevado pedestal en forma de pirámide truncada.
1950. “Figura”. Talla en caoba. Premio de Escultura. V Bienal de Artes Plásticas. Sto. Dgo. R. D.
1985. Es nombrado miembro de la Sociedad de Pintores y Escultores con sede en Madrid, España.
1994. El Rey de España, don Juan Carlos de Borbón, le otorga la condecoración de la Orden del Mérito Civil. Santo Domingo, R. D.
1998. Recibe la Orden al Mérito Duarte, Sánchez y Mella otorgada por el presidente de la República Leonel Fernández Reyna. Santo Domingo, R. D.
1954. Antonio Prats-Ventós junto a su obra “Taíno de piedra” conocida como “Indio de Boca Chica”, ya no existe.
1951. El escultor Antonio Prats-Ventós junto a su escultura “Alegoría” para la fachada de la Galería de Trujillo.
1952. Antonio Prats-Ventós en plena labor, de su obra “Totem”, talla en caoba.
1953. Modelando en su taller una de sus esculturas que adornaban el Palacio de Bellas Artes de Santo Domingo.
1968. Antonio Prats-Ventós frente a uno de sus relieves “El nacimiento de Venus”. Homenaje a Boticelli.
1974. Antonio Prats-Ventós, “Maternidad”. Mármol Ónix. Plaza de la Cultura. Santo Domingo, R. D.
1980. Antonio Prats-Ventós, Colección “El Bosque”. Talla en madera sabina, 40 piezas, 1972-1973. Exposición Museo de Arte Contemporáneo, Madrid, España.
1981. Antonio Prats-Ventós, Colección “El Bosque”. En su exposición de las Reales Atarazanas de Barcelona, España.
"Cabeza de Mulata". 1947. Talla en caoba patinada. 27” x 24”. Museo de Arte Moderno.
1951. “Forma”. Caoba. Palacio de Bellas Artes. R. D.
1953. Crea las ocho esculturas que adornaban el Palacio de Bellas Artes.
1953. Palacio de Bellas Artes. Sto. Dgo. R. D.
1958. “Cabeza del Maestro Pablo Casals”. Bronce. Arrojada al mar Caribe por orden del dictador Trujillo.
1965. “Los Apóstoles”. Talla caoba.
1970. Antonio Prats-Ventós, en su taller frente a su obra “Los Apóstoles”. Caoba.
1975. “Forma”. Bronce.
1978. Colección “La Selva”. Talla en caoba.
1980. “El Bosque”. 40 tallas en madera de sabina. Museo de Arte Contemporáneo, Madrid, España.
1980. “Las Meninas”. Talla en caoba policromada. Sto. Dgo., R. D.
1980. “Niño tocando una nube”. Talla caoba.
1985. Antonio Prats-Ventós, “Monumento a los Héroes de la Restauración”, Capotillo, R. D.
1991. “El Pesebre” de la Catedral Primada de América. Sto. Dgo., R. D.
1970. “El Naranjo”. Talla caoba. Altar Mayor Basílica de Ntra. Señora de la Altagracia. Higüey. R. D.
1985. “Monumento a los Héroes de la Restauración”. Capotillo, Dajabón. R. D.
1983. “Bodegón”. Relieve en caoba policroma- da. Restaurante Casa España. Sto. Dgo, R. D.
1982. “Búho”. Caoba policromada y pan de oro.
1956. “Ondina”. 2.do Premio Escultura. VIII Bienal de Artes Plásticas. Colección Museo de Arte Moderno, R. D.
1948. “Inocencia”. Escultura alabastro. Único Premio Escultura. IV Bienal de Artes Plásticas. Sto. Dgo., R. D.
1991. “El Pesebre” de la Catedral Primada de América. Sto. Dgo., R. D.
1954. “Maternidad". Caoba. 1.er Premio de Escultura. VII Bienal de Artes Plásticas. Sto. Dgo. R. D.
1957. Vista frontal del Monumento a los Héroes de la Batalla del 19 de Marzo. Azua, R. D.
1952. “Pegaso”. Cemento. Escuela Perú, Sto. Dgo., R. D. En los inicios de la década del 50 el Gobierno dominicano emprendió un plan de construcciones escolares en todo el país, pero muy especialmente en la capital de la República. El trabajo no se limitó a la parte arquitectónica, consistente en edificios que fueron llamados palacios, sino que abarcaron aspectos decorativos que encomendó a dos jóvenes artistas: el pintor Eligio Pichardo y el escultor Antonio Prats-Ventós. Este último realizó relieves y esculturas de bulto con temas alegóricos. Una de aquellas obras es la que con el nombre de Pegaso se reproduce en la siguiente página. Obsérvese la perfecta anatomía del cuerpo del caballo alado, de un sorprendente realismo.
(Arriba) 1973. Plaza de la Trinitaria. Velas en cemento. Escudos en Bronce. Sto. Dgo., R. D. (Abajo) El "Esclavo Lemba", el "Padre Las Casas" y el cacique 'Enriquillo". 1973. Esculturas en cemento. Fachada frontal del Museo del Hombre Dominicano.
"Ciervo". 1970. Talla en guayacán. 15”x 28”x6
"Grupo". 1991. Escultura en bronce. Vertical y compacta, la figura presenta un movimiento de ascenso.
Prats - Ventós junto a uno de sus relieves en metal policromado. Diciembre 1998.
"Forma". 1987. Talla en Caoba 19”x10”. Una escultura del más puro abstraccionismo.
"Dama Flamenca". 1972. Talla en caoba. Dentro de su tratamiento abstracto, la pieza refleja la gracia de una figura femenina.
Antonio Prats-Ventós en su taller, trabajando una de sus esculturas. 1979.
"Aguatera". 1948. Talla en caoba. Al modo de las figuras hieráticas del período arcaico griego, esta escultura es de la primera época de Prats-Ventós, es fuerte y maciza. Su rostro carece de expresión.
"Inocencia". 1948. Talla en alabastro 15” x 15”.Museo de Arte Moderno. Esta escultura se mantiene dentro de la técnica en la las masas compactas se imponen.
"Figura". 1963. Talla en caoba 19” x 35”. Museo de Arte Moderno. En esta pieza en madera de caoba puede comprobarse cómo Prats-Ventós ha conseguido aligerar las masas con el uso abundante de espacio.
"Luna II". 1970. Talla en caoba. Ligera y dotada de un movimiento circular, la escultura obedece a un estilo puramente abstracto.
"Angel Azul". 1996. Talla en caoba policromada y pan de oro. 25” x 5”.
El grupo escultórico tallado en un solo tronco de caoba y titulado "La Dama", de dos metros de alto, dio inicio a una serie sobre el tema. Fue expuesto por vez primera en 1978.
"Cabeza de Rabino". Detalle. 1980. Talla en caoba. Colección Los Rabinos.
"Búho". 1982. Talla en caoba. Dentro de la colección Los Búhos, este es uno de los pocos con formas abstractas y en él dominan los espacios sobre las masas.
Una muestra del sentido del humor de Prats-Ventós es la talla en caoba titulada "El Culo del Escribano". 12” x 16”. 1984.
Prats-Ventós junto a su colección "El Bosque", en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, España. Diciembre. 1980.
Esta talla de la "Colección Antillana", 1994, tiene una gran carga de sensualidad. 36” x 18”.
El niño Jesús, principal personaje de "El Pesebre", descansa en una cuna de oro.
El conjunto religioso titulado "El Pesebre" está compuesta por 17 figuras talladas en caoba policromada. Fue realizado en 1983 y donado a la Catedral por la Fundación Domínica - Hispana de la Catedral de Santo Domingo. En el año 1997 se le agregaron dos figuras -"El Leñador" y "La Hilandera"- propiedad de la familia Prats-García.
"Cristo sin Cruz". 1968. Talla en madera de caoba de 2.50m de altura. Iglesia de la parroquia de San Antonio Claret.
"El Cristo Crucificado" de la iglesia de la Santísima Trinidad es la única escultura de este tema con formas abstractas. La talló Prats-Ventós en 1981. El rostro, el cuerpo y las extremidades de la imagen están horadados por espacios que sustituyen detalles anatómicos.
"Los Apóstoles". Dos piezas salidas del mismo tronco de caoba. Miden algo más de tres metros de alto. Fueron expuestas por primera vez en el año 1970. La esculturas aparecen aquí en el taller de Prats-Ventós al momento de ser terminadas.
El artista con su habitual cigarrillo en la boca posa junto al relieve Sagrada Familia, en caoba policromada tallado para la Iglesia Episcopal San Andrés. 1964.
"Muro de las Lamentaciones" de la serie Los Rabinos. Talla en caoba. 1980.
"El Merengue". Homenaje a Casandra Damirón. 1984. Talla en caoba policromada. 69” x 33”. Esta escultura de tamaño natural en un solo tronco de caoba es de las pocas de índole costumbrista de Prats-Ventós. En ella ha captado el artista la gracia del baile criollo y su policromía resalta el carácter alegre del tema.
"El Pesebre de la Ciudad de Santo Domingo". 1998. Réplica de cerámica de seis pies en miniatura. Moldes. Madrid, España. Confección Marianela Morales. Edición limitada.
"Trigonometal". 1969. Cobre y hierro. En esta escultura Prats-Ventós reprodujo las formas de una cemí de tres puntas, considerado por los taínos el dios que hacía crecer la yuca.
“Forma”. 1980. Talla en caoba. 26” x 10”. La ricas y variadas maderas dominicanas permitieron a Prats-Ventós plasmar su inspiración en esculturas de una gran belleza. La caoba fue uno de sus materiales predilectos. Sabía aprovechar al máximo sus cualidades de color, de dureza y de textura, tal y como puede apreciarse en esta talla maciza en la que la superficie bruñida exalta las formas que obedecen a un movimiento rítmico de protuberancias audaces.
“Forma”. 1987. Talla en mármol rosado. El color, la riqueza del material y perfecta volumetría conseguida por Prats-Ventós es esta pieza, hacen de ella un ejemplo de lo que puede realizar la imaginación unida a la destreza de la mano. La escultura, decididamente abstracta, muestra la capacidad del maestro para expresar la belleza de las formas sin apoyarse en algo concreto y definido.
“Figura” 1987. Talla en ónix. Las especiales características del material utilizado en la pieza - el ónix- determinaron las formas. las bandas de tonos contrastantes de esta variedad del ágata guiaron la mano del artista, quien no necesitó ningún otro motivo para transformar la obra en un objeto tan bello como inimitable. Prats-Ventós supo aprovechar al máximo lo que la Naturaleza le ofrecía. “Figura” 1987.
“Triángulo Volumétrico”. 1990. Talla en mámol portoro. El rico material en que está trabajada esta escultura y la presencia de espacios que aligeran el conjunto, hacen de esta pieza una clara expresión del dominio que sobre la talla en pieadr logró alcanzar Prats-García al Centro Cultura de España en el año 2000. La sala principal dee esa institución ostenta el nombre del artista.
"Brote". 1970. Bumpers de automóviles. En sus experiencias con los metales, iniciadas en el año 1967, Práts-Ventós utilizó materiales de desecho, como los “bumpers” de automóviles de esta obra, logrando interesantes efectos de luz y movimiento. La pieza presenta un rotundo sentido de verticalidad en el que el volumen va poco a poco reduciéndose y aligerándose hasta llegar a la cúspide. Con los metales buscaba el artista solucionar las limitaciones de la madera y de la piedra.
“Encuentro”. 1992. Bronce policromado. La forma de triángulo esférico propia de un cemí taíno, dios de la agricultura, fue adoptada por Prats-Ventós para crear esta espectacular escultura en la cual el ritmo y el color del metal se completan con la bruñida superficie de suave textura. La policromía, brillante y espaciada, enriquece aún más los valores estéticos de la obra.
“Forma”. 1951. Talla en caoba. Las curvas entrelazadas, los huecos y las hendiduras hechas en la madera logran un efecto de ligereza y elegancia sin necesidad de sugerir nada concreto. Le basta para ser bella su ritmo, la suavidad de su textura y los matices de la materia en que está esculpida la obra.
“Cabeza de Medusa”. 1985. Talla en caoba. La obra figurativa de Prats-Ventós corre simultáneamente con la abstracta y en una y otra obtiene brillantes resultados. La cabeza de esta figura mitológica, enigmática y misteriosa, de sencillos rasgos faciales, está rodeada de un tocado que semeja alas, sabiamente talladas con profundas hendiduras que aligeran las formas.
“La Dama Chiquininga”. 1980. Talla en caoba policromada. La serie Las Damas, que pronto se completó con las colecciones de Las Meninas y Las Infantas, responde a un tipo de trabajo que sirvió al artista de “divertimiento” y en el que se hizo más patente su constante diálogo con la madera. La serie se prolongó durante muchos años, sin que jamás se repitiera. En cada figura siempre había algo que la identificara y la distinguiera de las demás. En esta ocasión fue su pequeño tamaño lo que le sugirió el título.
“La Dama de las Nieves”. 1980. Talla en caoba policromada. La gracia de la figura radica en el uso generoso de la policromía que envuelve la totalidad del cuerpo La Dama. El enorme tocado que cubre su cabeza logra con sus volúmenes curvos romper la rigidez del cuerpo. La escultura es solemne y el tratamiento decorativo la distingue de las demás esculturas sobre el tema.
“La Dama Desnudándose”. 1980. Talla en caoba. En un solo tronco de madera, sin añadiruas, ni agregados, realizó Prats-Ventós esta talla en la que las protuberancias y las irregularidades del material sugirieron las formas al creador. En ella el diálogo entre el artista y la caoba fue constante, y los resultados no pudieron ser mejores. Obsérvese el movimiento de los paños al dejar al desnudo el cuerpo femenino y pese a estar trabajada en un rígido tronco, hay gracia y flexibilidad en la escultura.
“Menina”. 1991. Bronce 11”x4”. Aunque la madera fue el material más usado por Prats-Ventós para crear sus Meninas, sus Damas y sus Infantas, también en ocasiones utilizó el metal, el bronce especialmente. De superficie tersa y brillante, esta figura de medio cuerpo se completa con un ancho tocado. Pequeña de tamaño, la Menina creada en la última década del pasado siglo demuestra cómo el artista manejaba con igual seguridad y destreza las más diversas técnicas.
“Búho”. 1982. Talla en caoba. La misteriosa apariencia de los búhos –las aves de la noche– cautivaba la atención de Prats-Ventós quien veía en ellos unas huidizas criaturas de mirada fija y expresión rapaz. En varias ocasiones el búho fue tema de sus esculturas, a veces realizadas en piezas macizas de madera, masas compactas revestidas de bruñido barniz y cuyos rasgos realistas contrastan con los de otras piezas abstractas en las que los espacios se imponen a las masas.
“Búho”. 1982. Talla en caoba policromada y pan de oro. De una gran riqueza cromática, este extraño búho tiene una expresión de alerta y sus ojos redondos, sumidos en profundas órbitas, parecen dirigir su mirada hacia un curioso espectador. El contraste entre la oscura madera y el brillo dorado del pan de oro otorga a la pieza valores especiales que le imprimen calidad de joya.
“El Bosque”. 1973.Colección de 40 piezas talladas en madera de sabina. La fotografía fue tomada en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid el día de la inauguración de una exposición de esculturas de Prats-Ventós el 5 de diciembre de 1980. La esbeltez de las piezas, la perfección de la talla, la diversidad y a la vez la armonía de las formas, su condición de conjunto transitable, su evocación de los árboles del trópico y la majestuosidad de sus elementos hacen de El Bosque una de las obras cumbres de la producción de este escultor.
“El Bosque y La Selva”. 1981. Bajo las varias veces centenarias bóvedas de las Reales Atarazanas de Barcelona, España, fueron expuestas esculturas de Prats-Ventós de los conjuntos El Bosque y La Selva, además de otras piezas aisladas. Las tallas en maderas preciosas dominicanas ponían un acento tropical en el crudo invierno de la ciudad catalana. Las obras fueron llevadas a Barcelona al concluir su exposición en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid.
“Pieza de La Selva”. 1980. Talla en caoba. Como una secuencia de El Bosque, Prats-Ventós decidió emprender la talla de otro conjunto que, con el título de La Selva, presentaría el aspecto inhóspito de la tierra dominicana. “Mientras el bosque es complaciente, decía el artista, la selva es agresiva”. En las piezas de La Selva se revela la exuberancia de las regiones cálidas y la fuerza de la Naturaleza se muestra pujante y vigorosa. Esta pieza, con sus oquedades y sus protuberancias, con sus redondeces y sus espacios, revela la intención de su creador.
Pieza de Procesión por un "Árbol Muerto”. 1990. Talla en roble americano. La preocupación por los daños inferidos a la Ecología llevó a Prats-Ventós a tallar una serie de 20 piezas, dramática y espectacular, de una textura irregular conseguida a golpes de gubia. Abstracto con referencia a la Naturaleza, este conjunto combina espacios y masas de modo equilibrado y es a modo de una transición entre La Selva y la Colección Antillana. El escultor buscó imprimir en cada pieza una expresión de tristeza lograda pese a ser todas ellas de formas abstractas.
“Colección Antillana”. 1994. Talla en caoba. La Colección Antillana fue el compendio de los tres anteriores conjuntos creados por Prats-Ventós con un denominador común: el interés por la Naturaleza. En este nuevo grupo el artista resumió la serenidad de El Bosque, la agresividad de La Selva y la tristeza de Procesión por un Árbol Muerto, añadiéndole un nuevo ingrediente: la sensualidad. Esta condición se refleja en unas obras más trabajadas, más barrocas y, en opinión del autor, con más oficio. Una parte de las obras fue tallada en caoba y el resto en roble.
Piezas de “El Pesebre”. 1983. Talla en caoba policromada y pan de oro. Catedral de Santo Domingo. Detalle del conjunto El Pesebre conservado en la Catedral de Santo Domingo. Estas cuatro figuras religiosas están en el misterio: el Ángel con sus alas desplegadas, el Niño Jesús en su cuna de oro, la Virgen María en humilde actitud, y San José, más realista, más humano que las demás figuras. El grupo escultórico se expone en la temporada navideña en la Santa Basílica.
“Ángeles”. 1997. Relieve en caoba policromada. 50” x 20”. Prats-Ventós. Con las manos juntas en actitud de orar, las alas desplegadas, presenta aquí el artista a varios de sus personajes celestiales.
“Relieve”. 1955. Vaciado en cemento. Academia Militar Batalla de las Carreras. El tema lo trató Prats-Ventós de tal forma que a la impresión de un motivo bélico, representado por un soldado y un marinero, se agregan las figuras de una mujer y un niño sosteniendo la paloma de la Paz; una paz cuya custodia está en manos de los militares.
“Industria Azucarera”. 1954. Relieve en cemento policromado. Secretaría de Estado de Industria y Comercio. Centro de los Héroes. Las obras de encargo, a pesar de coartar en cierto modo la inspiración del artista, fueron trabajadas por Prats-Ventós con dignidad y esmero, y reflejan siempre su dominio del oficio. En este relieve su autor ha logrado, junto a una equilibrada composición, un acertado tratamiento de la anatomía humana.
“Manolas con Frutas”. 1984. 36” x 29”. Tres figuras femeninas estilizadas, logradas con firmes pero escasos trazos, presentan una composición simétrica en la que destacan, por su volumen y su color, las frutas realistas del canasto.
“Damitas”. 1987. Relieve en caoba. 26” x 24”. El tema de Las Damas no lo limitó Prats-Ventós a las figuras de bulto. También lo trató en trabajos en relieve que, como éste, tienen igual empaque y distinción que las esculturas exentas, aunque por carecer de policromía resultan mucho más severas y sobrias.
“Tótem”. 1947. Talla en caoba. El arte de la raza taína sirvió de inspiración a Prats-Ventós. En este tótem el artista creó una figura humana a base de profundas incisiones en la caoba que recuerdan la técnica utilizada por los aborígenes en sus tallas en piedra o madera. Los rasgos faciales —ojos, orejas, boca y nariz— siguen las características propias de los taínos.
Homenaje a la Raza Taína”. Escultura en cobre. Exhibida en la Sala Rosa María en 1975, esta obra, de gran tamaño, impactaba por su movimiento vertical y por el ritmo de las formas. Fue destruida por el huracán David.
“La Inconclusa–Goliat”. Talla en caoba que al fallecer el artista quedó sin terminar. De ahí su título. La obra fue concluida siguiendo lo que él había marcado y desbastado. Detalles ampliados de la obra ilustran las primeras páginas de este libro.
Orantes”. 1967.Cedar carving.
Prats-Ventós y una de sus "Meninas". 1979.
Una de las 20 esculturas del conjunto. Procesión por un "Árbol Muerto". 1990.
“La Virgen María”. Detalle de "El Pesebre". 1983. Tallado en caoba policromada. 1.60 x 0.40 m. Catedral de Santo Domingo.
“Ángel en Adoración”. 1997.n Mahogany carving. 26” x 10”.
Detalle del "Monumento a Francisco del Rosario Sánchez". Relieve de bronce. San Juan de la Maguana.
“Forma”. 1987. Mármol rosa.
“Forma”. 1969. Ónix.
Antonio Prats-Ventós modelando la escultura “Antillana”, que fue fundida en cemento y expuesta durante la VI Bienal de Artes Plásticas en agosto de 1952.
“Maternidad”, 1973. Tallado en mármol ónix. 55” x 49”. Jardines del Museo de Arte Moderno. Esta escultura abstracta aligera las masas con un pequeño orificio que atraviesa la piedra.
“Menina con mariposa”. 1979. Tallado en caoba policromada y chapada en oro. 53” x 6.5”.
“Rabino poniendo aceite en la menorá”. 1980. Tallado en caoba policromada y chapada en oro.
“Ángel”. Detalle de “El Nacimiento”. 1983. 2.18 m x 0.44 m.
“Caballos I”. Las figuras estilizadas de los caballos de esta alfombra se destacan sobre un fondo rojo. 1986. 85” x 53”.